viernes, 30 de octubre de 2009

EL HERODES DEL SIGLO XXI

Entonces Herodes, al ver que había sido burlado por los magos, se enfureció terriblemente y envió a matar a todos los niños de Belén y de toda su comarca, de dos años para abajo, según el tiempo que había precisado por los magos. Entonces se cumplió el oráculo del profeta Jeremías: «Un clamor se ha oído en Ramá, mucho llanto y lamento: es Raquel que llora a sus hijos, y no quiere consolarse, porque ya no existen». (Mt 2,13)
En estos tiempos no es difícil imaginar qué es el aborto, que al igual que el Herodes bíblico, busca eliminar a niños inocentes, porque persiguen un fin, en este caso y como lo es también en el caso bíblico, un fin lucrativo, ya que detrás de estos grupos abortistas se encuentran grandes financieros que sólo promueven esto para su beneficio personal.
Es triste y lamentable observar imágenes y videos de niños abortados; pobres inocentes que no tienen culpa de nada, no tienen la culpa de que un patán haya abusado de una señorita, no tienen la culpa de que un par de jovencitos mal formados se hayan iniciado muy pronto en las relaciones sexuales, no tienen la culpa de que sus madres no los quieran por tener un síndrome; se pueden seguir enumerando tantos casos en donde siempre la luz de fondo es la mala formación espiritual, moral y social de la juventud circundante. Muchos niños en este momento están luchando por sus vidas y sus padres sufren al verlos en esta situación, pero también en estos momentos muchos niños están perdiendo la vida a causa del aborto, ya que los anti vida nos dicen que un pedazo de carne no siente, cosa que es meramente falsa.
Debemos de ser fuertes y decir que lo que están haciendo es un asesinato.
No seamos indiferentes y luchemos por la Vida.
ESCRITO POR MEA

jueves, 29 de octubre de 2009

APOLOGÍA AL SACERDOTE

A lo largo de la historia se narran acontecimientos y hechos importantes y también salen a la luz historias de hombres valientes que lucharon por el signo de la Cruz, es decir por Jesucristo.
Estos mueren al mundo y se unen a el como la semilla que se une a la tierra y da fruto.
Podemos reconocer aquí aquellos hombres que en una capilla lejana viven su ministerio de entrega al Señor.
Esos hombres que han renunciado al amor humano por un amor divino, el amor de su Dios en quien se confortan.
Ese hombre ha dejado de existir al mundo para sí y existe para los demás, porque su vida está al servicio de los hombres, ya no es el quien vive, sino es Cristo quien vive en él.
Ese hombre que obedeciendo el llamado deja lo bello del mundo, por lo grandioso y hermoso que se le muestra.
Qué sería de la Iglesia sin aquel hombre, qué sería del bienestar espiritual sin aquel hombre o aquellos hombres.
La entrega de aquellos hombres es un martirio sin derramamiento de sangre, ya que es una entrega total, dejándolo todo por amor a todos, muchos de esos hombres pudieron ser grandes empresarios o grandes políticos, pero dispuestos a seguir a Cristo entregaron todo su ser,
Y como no recordar a un Pío de Pietrelcina, a un san Juan Bosco, a un san Josemaría y aun Juan Pablo II grandes hombres que por su entrega total disfrutan de la casa del Padre.
A estos hombres a quienes le debemos ser hijos de Dios, que nos alimentan con el cuerpo de Cristo y con su palabra; son los Sacerdotes.
ESCRITO POR MEA